Caravana de migrantes centroamericanos: Viaje sin final ni regreso La Habana. Prensa Latina

Caravana de migrantes centroamericanos: Viaje sin final ni regreso La Habana. Prensa Latina

Los migrantes centroamericanos que tratan de llegar a Estados Unidos volvieron a reanudar sus caravanas esta semana después de meses de interrupción a causa de la pandemia de la Covid-19, que solo hizo empeorar sus condiciones de vida.

Más de cinco mil personas partieron desde la norteña ciudad hondureña de San Pedro Sula en dirección a Corinto, en la frontera con Guatemala, en la primera etapa de un sueño que, para no pocos, termina en pesadilla. ‘Huyen de la narcodictadura del hambre, la miseria, la inseguridad y el desempleo’, expresó en conversación telefónica con Orbe el diputado por el Partido Libre Edgardo Castro.

‘Van rumbo norte’, subrayó Castro, legislador por el departamento de Cortés, donde comienza el viaje para algunos sin final ni regreso. ‘Ya conocimos que un joven hondureño murió al caer de un camión al entrar en Guatemala’, comentó.

El también miembro de la Comisión de Relaciones Internacionales del Congreso Nacional advirtió que, ante la proximidad de las elecciones del próximo 3 de noviembre en Estados Unidos, las caravanas podrían dar más motivos al presidente Donald Trump para justificar sus políticas antiinmigrantes, sus muros y su orden de militarizar la frontera.

A su vez, desmintió las falsas acusaciones del gobernante republicano, quien intenta criminalizar a todos los inmigrantes. ‘En los grupos van hombres, mujeres, niños, jóvenes. Son gente que emigra buscando una mejor vida. Honduras está —dijo— bajo un colapso económico’.

Pese a las restricciones impuestas entre países por la actual emergencia sanitaria, la caravana pretende atravesar la ruta por Guatemala —que reabrió sus fronteras terrestres— y México hasta alcanzar su destino.

Dos años atrás, una movilización similar poco antes de las elecciones de medio término en Estados Unidos colocó el tema migratorio en el centro de la campaña electoral.

Durante la pandemia el flujo de personas que sale de Centroamérica se redujo drásticamente y la Casa Blanca aprovechó para reforzar sus políticas en ese sentido.

Trump congeló el sistema de asilo y expulsó a más de 10 000 indocumentados en medio de la Covid-19.