El escándalo narco de Uruguay amenaza derribar al gobierno Montevideo. Agencias

La renuncia del canciller Francisco Bustillo, ha sacudido a Uruguay después de que se vio envuelto en un escandaloso caso relacionado con el narcotraficante fugado Sebastián Marset, quien está siendo buscado por las autoridades policiales de Uruguay, Paraguay, Bolivia y Estados Unidos.
Este escándalo se desarrolla en el contexto de una investigación que involucra la entrega de un pasaporte a Marset, un narco buscado por la justicia de Paraguay por el asesinato de un fiscal paraguayo en Colombia. Marset, además de futbolista, en Paraguay era empresario, productor de eventos e incluso músico.
La oposición uruguaya ya había cuestionado la actuación del Gobierno en este caso, lo que llevó a la renuncia de la vicecanciller Carolina Ache y la apertura de una causa judicial. Hasta el momento, varios funcionarios, incluyendo al ministro del Interior Luis Alberto Heber, han declarado ante las autoridades judiciales.
Bustillo presentó su dimisión tras la filtración de audios comprometedores en los que le aconsejaba a su vicecanciller, Carolina Ache, no colaborar con las autoridades en la investigación. Estos audios revelaron una trama de intentos de obstrucción a la justicia y manipulación de pruebas.
La gravedad de la situación se acentuó cuando se descubrió que Bustillo había sugerido a Ache que destruyera su teléfono celular para evitar la entrega de evidencia a las autoridades. Además, intentó influir en la investigación interna en la Cancillería. La divulgación de estos audios generó un fuerte repudio en el ámbito político uruguayo, tanto del oficialismo como de la oposición, quienes exigieron su destitución inmediata.
Bustillo ha negado cualquier ilegalidad en el proceso de tramitación del pasaporte para Marset, argumentando que en ese momento el narco no era buscado por la justicia paraguaya. Sin embargo, el escándalo y las pruebas sonoras presentadas por su vicecanciller llevaron a su renuncia.

Pueden salir otros ministros
El periodista Luis Custodio no descarta que podría darse la salida de otros altos cargos del Gobierno uruguayo, tales como el ministro del Interior y el subsecretario del mismo ente.
“En este momento, el presidente Luis Lacalle Pou está en una reunión en Estados Unidos y tiene previsto su retorno el día sábado. Hay una lista más de jerarcas en peligro. Cuando el presidente llegue nos enteraremos si habrá mis destituciones o pedidos de renuncia, expresó el comunicador.
“Puede haber un pedido de renuncia para el ministro del Interior, para el subsecretario y para un asesor especial del presidente de la Republica en cuestiones de imagen, a quien también se vincula con algunos hechos de apariencia absolutamente irregular”, aseveré Custodio en entrevista para una radioemisora de Montevideo.
El periodista y escritor uruguayo Pablo Cohen, manifestó el viernes que la crisis en el gobierno uruguayo surgió a partir de las irregularidades cometidas para expedir rápidamente el pasaporte del narcotraficante Sebastián Marset. “El presidente Lacalle Pou reaccionó con enorme furia e indignación”, aseguró durante una entrevista a un programa radial de Montevideo, publicada por el diario digital Perfil
Pregunta: ¿Nos podés hacer una reseña de lo que está pasando en Uruguay?
Usualmente soy muy sintético, pero este tema es tan novelesco que es muy difícil, en serio, hacer una síntesis. Vamos a los últimos acontecimientos porque si no sería una locura, pero básicamente todo tiene un origen.
Sebastián Marset es uno de los narcotraficantes más peligrosos del mundo. Es un talento uruguayo para el mal. Y a Marset se le expidió un pasaporte en muchos países, tiene un montón de identidades. Esto es muy cinematográfico, pero es todo cierto, y se lo encontró en Paraguay, en Brasil y en Bolivia con distintos nombres.
El tema es que en Uruguay se le expidió muy rápido el pasaporte, hubo una gestión de su abogado, Alejandro Balbi, que siempre estuvo sospechado de pertenecer a un círculo de penalistas que se mueven en la zona gris, pero bueno, es su trabajo también. Y el doctor Balbi hizo una gestión para que Marset tuviera ese pasaporte incluso desde Emiratos Árabes rápido, y ese pasaporte fue expedido rápido.
Hubo una reunión con la vicecanciller y el que expide el pasaporte es el Ministerio del Interior, no Cancillería, y eso en sí mismo fue una irregularidad, pero fue una irregularidad que le pasa a todos los gobiernos, porque, por ejemplo, en el gobierno pasado se había escapado Morabito, un mafioso italiano, de cárcel central. Es decir, el poder de las mafias y el narcotráfico en todos los países parece rebasar a la capacidad de los estados. Quiere decir que hasta ahí había un problema serio, pero que no había afectado demasiado al gobierno.
Lo que pasó en las últimas horas afectó muchísimo al Gobierno y creó una crisis institucional y política. Porque la vicecanciller, que en su momento denunció y dijo al Parlamento un montón de cosas que no eran ciertas, grabó al canciller, habló ante la Justicia, comprometió al canciller e hizo que renunciara porque este le propuso “perder” su teléfono, ya que en ese teléfono la vicecanciller tenía charlas con Guillermo Maciel.
Maciel es el viceministro del Interior, que le había advertido que Marset era un narcotraficante peligroso. Y hay un asesor de presidencia muy importante, Roberto Lafluf, que podría ser análogo a lo que fue Marcos Peña en la presidencia de Macri en cuanto al poder y a la influencia que tiene, que le propone a Carolina Ache, la vicecanciller renunciante que hoy es la que aporta todo esto a la Justicia, que destruya y adultere evidencia.
Pregunta: O sea, que pierda el celular… El canciller que ya renunció es el que le dice “perdé el celular, fíjate, te planto escenarios. Capaz que en enero y febrero no lo tenías, perdelo”.
Alejandro Gomel: ¿Encubrir a su vicecanciller? No, encubrir todo. El Ministerio del Interior es el que expide el pasaporte. Entonces, en todo caso, encubrir lo que era Cancillería, encubrir lo que ellos dijeron al Senado, mintiéndole al Senado de la República, todos: el ministro del Interior, el canciller, la vicecanciller, el viceministro del Interior, y cubrirse él también.
Pero hay algo más grave, que es que este asesor del Presidente, un asesor clave, Roberto Lafluf, según Carolina Ache, la viceministra renunciante, le pidió que adulterara evidencia, que borrara los mensajes que tenía con Maciel, el viceministro del Interior, que eran comprometedores, y que hiciera un nuevo protocolo, con un nuevo escribano, en el cual no aparecieran esos chats. O sea, ahí puede incurrir en destrucción de documentos públicos, en algún tipo de conspiración y varios delitos que se me escapan porque no es mi especialidad.
Pero está investigado ya por la Fiscalía, Roberto Lafluf, mano derecha del Presidente. El canciller debía caer, renunció rápidamente. La vicecanciller, despechada pero con pruebas objetivas, pone sobre la mesa la responsabilidad también del Ministerio del Interior. Es decir, del ministro del Interior como jefe, como responsable por acción u omisión, Luis Alberto Heber, y de Maciel, una persona fundamental del Ministerio, responsable por acción, que incluso en un momento, para pedirle que borre chats, usaba el teléfono de la hija. O sea, llama a Ache del teléfono de la hija para que no queden rastros.
Pregunta: Le dan documentación falsa, le proveen la vehículos para que llegue, porque lo hace a través de valijas diplomáticas, le proponen destruir pruebas a los integrantes del propio gobierno. Hasta ahora hay una renuncia que es la del canciller, Bustillo, pero va a haber más probablemente.
Claro, va a haber más. Esto ya había pasado y pasa muchas veces en estos estados latinoamericanos débiles, lo cual no es justificable, es entendible. El tema es que acá, la ciudadanía está indignada porque hay una serie de charlas del gobierno que demuestran que se mintió al parlamento y que básicamente la responsabilidad del Gobierno se trató de minimizar, de ocultar y encubrir.
Entonces, cuando entrás con manipulaciones institucionales o con mentiras propias del marketing político en una democracia tan estable y tan institucionalista como la uruguaya, la indignación es total. Lo lógico sería que renunciaran, y yo a la gente la invito a leer todo esto en internet porque realmente, aparte de ser muy entretenido, es muy interesante, es una novela muy larga, yo hice una síntesis.
Lo natural sería que el ministro del Interior cayera, que Maciel, esta persona importante del Ministerio también cayera. El canciller ya cayó, que Lafluf, este asesor clave que maneja toda la comunicación del gobierno, cayera. Eso sería lo lógico y lo que esperan los socios de la propia Coalición Republicana.
Recordemos que en Uruguay gobierna una coalición de mayoría blanca, pero hay otros partidos, por ejemplo el partido colorado, que se espera en estas horas que renuncie. Los legisladores blancos no están contentos porque le mintió al parlamento esta gente.
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Pregunta: ¿Y Lacalle Pou que reacción tuvo hasta aquí?
Lo único que sabemos, fíjate lo que es el timing en la vida de una persona y de un país, lo sabemos bien. El Presidente está hasta hace pocas horas en los Estados Unidos en visita oficial a Biden. Reaccionó con enorme furia, indignación, entre otras cosas.
Pero desde el punto de vista de la acción política, yo creo que hoy es un día clave para definir si vuelve rápido, si echa a esta gente, si puede hacer algo que antes pudo. Por ejemplo, lo que decía Nuria respecto al caso Marset. Él tenía la habilidad de, si querés, rápidamente apartar a gente que en su gobierno se había desviado de lo que se espera de un gobernante, por ejemplo, el senador Penadés, de quien se probó que es un pedófilo, y mantener igual su credibilidad como gobernante por esa acción rápida y porque la gente no cree que él tuviera que ver.
En este caso, donde el involucramiento es más institucional, va a ser más difícil que el Presidente se despegue de la responsabilidad. Ayer, Guido Manini Ríos, socio de la coalición, jefe de Cabildo Abierto, dijo que no cree que el Presidente no supiera lo que pasó. Su socio, no el Frente Amplio que ha actuado con mucha cautela y pidió que renunciaran las cuatro personas que mencioné antes, me parece que está esperando a ver qué hace el Presidente, una vez en Uruguay. Ahí sí se habla de juicio político.
Yo creo que no va a haber juicio político, pero creo que sí se puede minar mucho la credibilidad del Gobierno, que el sucesor del Gobierno, Álvaro Delgado, tenga entonces muy pocas chances de ganar la presidencial, que es el año que viene. Hay internas en junio, después elecciones y balotaje, porque acá el balotaje es muy exigente, 50% más uno de los votos, entonces casi siempre hay, y que el Frente Amplio se imponga en las elecciones presidenciales del año que viene, eso es lo que se habla. Que las consecuencias de esto van a ser políticas y electorales.
Pregunta: Hoy es un día clave con la vuelta del presidente Lacalle…
Yo creo que hoy y mañana van a ser, quizás, los dos días más importantes de la presidencia de Lacalle, por lo menos si uno lo ve del lado negativo. Recordemos que Lacalle tuvo que enfrentarse a problemas muy serios, no sólo por el caso Penadés, sino por la sequía y sobre todo por la pandemia, que igual se enfrentó de una manera muy exitosa y singular, pero en este caso se ve ante un aprieto que tiene que resolver muy rápidamente.