Abogados denuncian que no pueden encontrar a padres de niños separados de sus familias Washington. CBS News

Un grupo de abogados designados por un juez federal para identificar a las familias inmigrantes que fueron separadas por la administración Trump, afirmaron esta semana que todavía no han localizado a los padres de 545 niños, y que alrededor de dos tercios de esos padres fueron deportados a Centroamérica sin sus hijos, según una declaración de la Unión Americana de Libertades Civiles, conocida en inglés por sus siglas ACLU.

La administración Trump instituyó una política de “tolerancia cero” en 2018 que separaba a los niños y padres migrantes en la frontera sur de los Estados Unidos, pero más tarde confirmaron que en realidad habían comenzado a separar a las familias en 2017 a lo largo de algunas partes de la frontera bajo un programa piloto. La ACLU y otros bufetes de abogados pro-bono se encargaron de encontrar a los miembros de las familias separadas durante el programa piloto.

A diferencia de las 2.800 familias separadas bajo tolerancia cero en 2018, la mayoría de las cuales permanecían bajo custodia cuando se puso fin a la política por orden ejecutiva, muchos de los más de 1.000 padres separados de sus hijos bajo el programa piloto ya habían sido deportados antes de que un juez federal de California ordenara que fueran encontrados.

“Es fundamental averiguar tanto como sea posible acerca de quién fue responsable de esta horrible práctica sin perder de vista el hecho de que cientos de familias aún no han sido encontradas y permanecen separadas”, dijo Lee Gelernt, subdirector del Proyecto de Derechos de los Inmigrantes de la ACLU. “Hay mucho más trabajo por hacer para encontrar a estas familias”.

“La gente se pregunta cuándo encontraremos a todas estas familias, y tristemente, no puedo dar una respuesta. Simplemente no lo sé. Pero no dejaremos de buscar hasta que encontremos a cada una de las familias, no importa cuánto tiempo tome. La trágica realidad es que cientos de padres fueron deportados a Centroamérica sin sus hijos, que permanecen aquí con familias de acogida o parientes lejanos”.

La ACLU y otras organizaciones que forman parte de un “comité directivo” nombrado por la corte se enteraron de que más de 1.000 familias fueron separadas en 2017, según los datos proporcionados por el Departamento de Seguridad Nacional. De ellos, el comité ha podido contactar a los padres de más de 550 niños y cree que unos 25 de ellos pueden tener la oportunidad de volver a los EE.UU. para reunirse.

Gelernt dijo que algunas de las familias que han sido contactadas han elegido mantener a sus hijos en los EE.UU. con miembros de la familia o familias patrocinates “por temor a lo que les podría suceder a sus hijos si regresan” a sus países de origen.