Covid-19 frena migración cuando estaba en niveles récord, según la ONU Naciones Unidas. Agencias

La pandemia del coronavirus frenó la migración internacional en su punto más alto, cuando el número de personas que viven fuera de su país de origen había alcanzado los 281 millones a nivel global, según un informe publicado este viernes por Naciones Unidas.

Aunque todavía no hay datos oficiales, la ONU ofrece algunos cálculos preliminares según los cuales la crisis del COVID-19 podría haber reducido en unos dos millones (un 27 por ciento) el crecimiento previsto del número de migrantes durante la primera mitad de 2020.

Se trata sólo de una aproximación, pues la organización se ha limitado a estimar que entre el 1 de marzo y el 1 de julio (fecha hasta la que abarca el estudio) hubo en todo el mundo un saldo migratorio cero, pero da una idea del tipo de impacto que puede tener la crisis, sobre todo cuando se tenga en cuenta el conjunto del año.

Creemos que era una suposición aceptable en ese momento, porque sabemos que muchas personas que querían volver a sus países no pudieron hacerlo y que muchos que tenían previsto emigrar tampoco pudieron”, explica a Efe Clare Menozzi, la principal responsable del informe.

Menozzi, en todo caso, subraya que si se tiene en cuenta todo 2020 obviamente la cifra sería mucho mayor y apunta que, aunque están empezando a recibirse números migratorios nacionales, estos no se incluirán hasta el siguiente estudio, que se elabora cada dos años.

La crisis sanitaria, además, puede tener un impacto a más largo plazo en las tendencias migratorias, con cierres fronterizos prolongados o por el destrozo económico que la pandemia ha hecho en sectores como el de los servicios, que habitualmente son fuente de empleo para muchos migrantes.

Niveles récord

Esta situación se produce cuando la migración internacional estaba en niveles récord, tras dos décadas de claros incrementos que han situado el número de personas que viven fuera de su país en 281 millones, frente a los 173 millones del año 2000 o los 221 millones de 2010.

Esa diáspora representa aproximadamente un 3.6 por ciento de la población mundial y supera por ejemplo el número de habitantes de Indonesia, el cuarto país más poblado del mundo, según apunta Menozzi.

Como región, Europa continúa siendo la que más inmigrantes acoge, con un total de 87 millones, seguida de Norteamérica (59 millones) y del Norte de África y Asia Occidental (50 millones).

Latinoamérica, mientras, vio cómo el número de migrantes dentro de la región se doblaba en las últimas dos décadas, en buena parte por el gran número de venezolanos desplazados a otros países a causa de la crisis de los últimos años.

A día de hoy, dos tercios de los migrantes se concentran en 20 países del mundo, en su gran mayoría Estados de altos ingresos.

Estados Unidos sigue siendo con mucha diferencia el país con más residentes nacidos fuera de su territorio, unos 51 millones, un 18 por ciento del total de migrantes del mundo.

Le siguen Alemania, con 16 millones; Arabia Saudita, con 13 millones; Rusia, con 12 millones, y el Reino Unido, con nueve millones.