Más de 5 mil muertos y 10 mil desaparecidos en Libia Trípoli. Agencias

Más de 5 mil muertos y 10 mil desaparecidos en Libia Trípoli. Agencias

Miles de personas han muerto en Libia a causa de las inundaciones provocadas por las fuertes lluvias que asolaron partes del país este fin de semana, un desastre agravado por el colapso de dos presas en la ciudad costera de Derna.

El número de fallecidos por la tormenta Daniel, en noreste de Libia, alcanzó 5,200 mientras los desaparecidos superaron los 8 mil 200 sólo en Derna, la ciudad más afectada, según el gobierno paralelo del Este de Libia, radicado en Bengasi y apoyado por el Parlamento.

Libia lleva años dividida entre un gobierno reconocido por la OTAN y otros países con sede en Trípoli y una región administrada por separado en el Este, incluida Derna.

La tormenta Daniel, calificada por los expertos como un “fenómeno extremo en términos de cantidad de agua caída”, afectó en los últimos días Grecia, Turquía y Bulgaria, con un saldo de 27 muertos.

Tras azotar Grecia y Turquía, el ciclón Daniel fue degradado a tormenta subtropical el 9 de septiembre y comenzó a debilitarse este lunes cuando se dirigía hacia el vecino Egipto, según un informe del Centro Meteorológico Regional Árabe.

“Es la primera vez que nos vemos expuestos a este tipo de condiciones meteorológicas”, dijo Ahmed Al-Mismari, portavoz del Ejército Nacional Libio, que controla el este del país. Los ciudadanos que escaparon de Derna abandonaron la ciudad “como si hubieran nacido hoy, sin nada”, dijo.

Al-Mismari declaró en una rueda de prensa televisada que la catástrofe se produjo tras el colapso de las presas situadas sobre Derna, que “arrastraron al mar barrios enteros con sus habitantes”.

Mismari cifró el número de desaparecidos entre 5 mil 6 mil.  El director de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja afirmó que el número de desaparecidos ronda los 10 mil.

Ruptura de dos presas en Derna

En Derna, la cuarta ciudad más grande con 120 mil habitantes, dos presas colapsaron, vertiendo más de 33 millones de litros de agua que desembocaron en el centro de la capital y arrastraron zonas residenciales, puentes y carreteras a su paso. Mientras, decenas de localidades y pueblos continúan sumergidos por las inundaciones en Bengasi, Al Bayda, Al Marj y Soussa

El Centro Médico de Tobruk reveló la recepción de 45 cuerpos de ciudadanos egipcios y la embajada de Palestina confirmó la muerte de doce de sus nacionales, incluido un menor de cinco años. Ante la masiva concentración de cadáveres, las autoridades locales pidieron la colaboración ciudadana para participar en las tareas de rescate y trasladar a las víctimas a las morgues de las localidades vecinas.

El este de Libia alberga los principales yacimientos y terminales petrolíferas. La Compañía Nacional de Petróleo (NOC) ha declarado el “estado de máxima alerta” y “suspendido los vuelos” entre los centros de producción, donde la actividad se ha reducido drásticamente.

El portavoz del Ministerio del Interior del Gobierno, Muhammad Abu Moshe, advirtió de que las cifras podrían seguir aumentando en las próximas horas mientras continúan las tareas de rescate, complicadas por el difícil acceso a esta zona montañosa y los cortes en las telecomunicaciones.

Su homólogo del Gobierno de Unidad Nacional (GUN), con sede en Trípoli y reconocido por la comunidad internacional, Tareq al Kharaz, reveló por su parte que 1.300 cuerpos han sido ya identificados y enterrados mientras familias enteras se encuentran en paradero desconocido como consecuencia de las lluvias torrenciales, lo que dificulta las labores de reconocimiento.

“No necesitamos alimentos ni medicinas sino equipos especializados en rescate y búsqueda. Tenemos un gran número de cadáveres arrastrados al mar por las inundaciones, lo que obstaculiza su recuperación”, declaró el primer ministro del GUN, Abdelhamid Dbeibah, durante un homenaje a las víctimas en la capital.

El Consejo de Ministros de su administración aprobó este martes la asignación de un presupuesto de 2 mil millones dinares (384 millones de euros) para el fondo de reconstrucción de Bengasi y Derna así como 500 millones de dinares (96 millones de euros) destinados a los damnificados, por lo que ordenó al Ministerio de la Gobernación Local realizar un censo de las áreas siniestradas.

Libia es especialmente vulnerable al cambio climático y a las tormentas cada vez más intensas que trae consigo un clima más cálido. El calentamiento hace que las aguas del Mediterráneo se expandan y que el nivel del mar suba 2,8 milímetros al año, lo que erosiona las costas y contribuye a las inundaciones y las zonas costeras bajas del país están en riesgo especial, según Naciones Unidas.

En Trípoli, el Consejo Presidencial, compuesto por tres personas y que ejerce la jefatura del Estado en el país dividido, pidió ayuda a la comunidad internacional. “Hacemos un llamamiento a los países hermanos y amigos y a las organizaciones internacionales para que presten ayuda”, declaró.