Desmienten post de presidente brasileño Brasilia. Prensa Latina

Un post del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, en la red social Twitter fue marcado como noticia falsa por el servidor microblogging, al promover soluciones contra la Covid-19 sin tener este sábado comprobación científica.

En el contenido, colocado en la plataforma en la tarde del viernes, Bolsonaro asegura que ‘los estudios clínicos demuestran que el tratamiento precoz de la Covid, con antimaláricos, puede reducir la progresión de la enfermedad, evitar la hospitalización y se asocian a una reducción de la mortalidad’.

Tal tuit violó las reglas de Twitter sobre la publicación de información engañosa y potencialmente dañina relacionada con el virus. Sin embargo, la red social determinó que, porque es de interés público, permanezca accesible.

La aseveración no está avalada por ninguna prueba, pues los científicos concluyeron que todavía no existe un tratamiento temprano con los medicamentos para el patógeno.

El único método científicamente probado para prevenir la enfermedad es el aislamiento social, la higiene de las manos y el uso de máscaras.

Twitter eliminó en marzo dos videos de la cuenta oficial de Bolsonaro en los que cuestionaba la cuarentena para contener la propagación del coronavirus SARS-CoV-2.

El exmilitar atacaba en ambos audiovisuales las medidas de confinamiento decretadas en casi los 27 estados del país, así como estimulaba el uso del medicamento cloroquina para tratar la enfermedad.

De igual manera recomendó a los políticos de Brasil salir a las calles y saludar a sus compatriotas para que comprendan la realidad del país bajo crisis de coronavirus, pese a que se violan medidas sanitarias.

En otro video, Bolsonaro comentó la inesperada gira que realizó por Brasilia en una jornada dominical.

A principios de este mes, Twitter borró permanentemente la cuenta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por violación de las reglas de uso.

La red comunicó que corría el riesgo de que el gobernante republicano incitara a más violencia tras sus partidarios invadir el 6 de enero el Capitolio, la sede del Congreso, lo cual provocó la muerte de cinco personas.