Juzgado argentino ordena liberar a líder social Milagro Sala Buenos Aires. TELESUR

Juzgado argentino ordena liberar a líder social Milagro Sala Buenos Aires. TELESUR

Un juzgado de Argentina emitió este viernes una orden para liberar a la líder social Milagro Sala, quien guarda prisión desde el 2016 por la denominada “Megacausa” que armó contra ella el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, y el juez que estaba a cargo del caso y aliado suyo, Isidoro Cruz.

De acuerdo con la orden del Juzgado Penal Económico de la provincia de Jujuy también se procederá a excarcelar a las dirigentes Gladys Díaz y Mirta Aizama.

Sala, quien ha reiterado que es víctima de persecución política, fue notificada en las primeras horas de la tarde que obtendrá su libertad. El proceso penal instaurado en su contra investigaba el presunto desvío de fondos públicos para la construcción de viviendas.

En este proceso se encuentran involucradas 23 personas, pero solo estas tres mujeres, integrantes del movimiento barrial Tupac Amaru, contaban con orden de prisión preventiva, lo que se consideró un acto arbitrario de Morales y Cruz, este último a la postre declarado incompetente y apartado de la causa.

Pese a esta decisión, Sala permanecerá privada de su libertad y a la espera de que la Corte Suprema de Justicia resuelva el recurso extraordinario presentado por su defensa en otra causa, conocida como “Pibes Villeros”.

Debido a su actual estatus, la líder social deberá prestar “caución juratoria, permanecer a disposición del Juzgado en lo Penal Económico y Delitos contra la Administración Pública y concurrir a todas las citaciones que se le formulen”, precisó el Juzgado Penal Económico.

Sala fue detenida en enero de 2016 bajo cargos de presunta incitación a la violencia y tumulto por encabezar una protesta en la provincia de Jujuy contra los cambios impuestos por el gobernador Morales en el sistema y programa de cooperativas.

En diciembre de 2017 fue trasladada a una vivienda para continuar con el cumplimiento de la disposición judicial. Durante estos años su salud se resquebrajó e incluso atentó contra su vida. “Llevo cuatro años y diez meses presa. No tengo ninguna sentencia firme y sigo detenida”, declaró días atrás.