Argentina espera regreso de periodista puesto en libertad en Bolivia Buenos Aires. Prensa Latina

Argentina espera este viernes la pronta vuelta a casa del fotorreportero Facundo Molares, tras la decisión de un tribunal boliviano de cesar su prisión preventiva y autorizarlo a viajar a su país.

El periodista, de 44 años, permanecía encarcelado desde noviembre del pasado año después del golpe de Estado en Bolivia.

El régimen de facto, que lideró Jeanine Añez, incluso expulsó del país al padre del comunicador, quien había viajado para estar junto a su hijo hospitalizado.

Con su salud cada vez más débil y complicaciones tras enfermarse de Covid-19, tanto su padre como el Gobierno argentino desde hace días esperan que se haga justicia y Facundo regrese a su nación.

En una nota difundida la víspera, la Cancillería precisó que fue informada sobre el cese de la prisión preventiva a Molares y el Tribunal Número 1 Penal de Sentencia de la ciudad de Montero autorizó que esa sanción pueda ser sustituida por otras instancias.

Al mismo tiempo resolvió el Tribunal que, en vista de los argumentos del abogado de Molares y del Consulado argentino en Santa Cruz de la Sierra, reciba atención médica en su tierra natal. La decisión fue tomada teniendo en cuenta el compromiso del gobierno de Bolivia de preservar la vida del ciudadano, precisa el texto.

Según el Tribunal, la autorización para viajar a Argentina, responde a que por su delicada salud están dadas las condiciones para reemplazar otras instancias que el propio ente judicial consideró. Una de ellas fue la detención domiciliaria en Santa Cruz, con autorización de salir a trabajar en los horarios de siete de la mañana a siete de la noche.

A la espera de que pueda resolverse el caso de fondo, como lo planteó sistemáticamente el Gobierno nacional, Argentina continuará con los esfuerzos para asegurar el pleno respeto de los derechos que correspondan a Molares, concluyó la Cancillería.

En días recientes, el nuevo ministro de Justicia del gobierno de Luis Arce, Iván Lima, solicitó a la Fiscalía revisar el caso de Molares y el por qué recibió tratos crueles y degradantes durante los conflictos políticos y sociales de 2019. Además ordenó quitarle los grilletes y consideró que no hay pruebas en su contra y fue detenido como preso político durante la dictadura.