ONU aprueba nuevos derechos para el Estado de Palestina Nueva York. Agencias

ONU aprueba nuevos derechos para el Estado de Palestina Nueva York. Agencias

Una abrumadora mayoría de 143 naciones de los 193 miembros de la ONU, volvió a pedir este viernes en la Asamblea General reconsiderar la integración de Palestina como Estado de pleno derecho, una decisión que compete al Consejo de Seguridad.

Solo nueve países votaron en contra: Argentina, Checa, Estados Unidos, Hungría, Israel, Micronesia, Nauru, Palau y Papúa Nueva Guinea, y 25 se abstuvieron. La resolución fue copatrocinada por España, Irlanda, Noruega y Bélgica, junto a más de setenta países. La coordinación de la Unión Europea quedó de nuevo en entredicho.

En verde, votos a favor; en rojo, votos en contra.

La resolución aprobada por la Asamblea concede además a Palestina nuevas competencias que superan su estatus actual de “Estado observador no miembro” y que definen su participación en la Asamblea General, pero especifica que no contará con derecho a voto ni podrá presentarse candidata a los organismos de Naciones Unidas.

En el texto aprobado este viernes, la Asamblea declara que el Estado de Palestina “está habilitado para la membresía en la ONU de acuerdo con el artículo 4 de la carta fundacional, y por consiguiente debe ser admitido como miembro de Naciones Unidas”; en consecuencia, “recomienda al Consejo de Seguridad reconsiderar el asunto favorablemente”.

El embajador ruso Vassily Nebenzia, afirmó que Palestina no merece otra cosa que ser miembro de pleno derecho de la ONU. “Es un deber moral de todos. Sólo la adhesión de pleno derecho permitirá a Palestina estar junto a los demás miembros de la Organización y disfrutar de los derechos que este estatus implica”, declaró.

El Consejo ya rechazó el pasado 18 de abril la membresía plena de Palestina con el único voto de bloqueo de Estados Unidos, mientras que doce miembros del Consejo la apoyaron y dos se abstuvieron; es decir, ahora se abre un periodo indeterminado en el que el Consejo podría volver a tratar el asunto, sin la menor claridad sobre el calendario.

La mayoría conseguida este viernes por la resolución favorable a Palestina es muy superior a los dos tercios requeridos, pero es apenas mayor que la que en 2012 consiguió la entrada de Palestina como Estado Observador, que tuvo entonces 138 votos favorables y también 9 en contra.

¿Qué significa la resolución?

Al adoptar esta resolución, la Asamblea General mejorará los derechos del Estado de Palestina dentro del organismo mundial, pero no el derecho a votar o a presentar su candidatura a órganos como el Consejo de Seguridad o el Consejo Económico y Social (ECOSOC).

La adhesión de Palestina requiere una recomendación del Consejo de Seguridad. Al mismo tiempo, la Asamblea determina que el Estado de Palestina cumple los requisitos para obtener dicho estatus y recomienda al Consejo de Seguridad que “reconsidere favorablemente la cuestión”.

Ninguna de las mejoras de estatus entrará en vigor hasta la apertura de la nueva sesión de la Asamblea, el 10 de septiembre.

He aquí algunos de los cambios de estatus a los que Palestina tendrá derecho a finales de este año:

֎ Estar sentada entre los Estados miembros por orden alfabético;

֎ Hacer declaraciones en nombre de un grupo

֎ Presentar propuestas y enmiendas e introducirlas

֎ Copatrocinar propuestas y enmiendas, incluso en nombre de un grupo;

֎ Proponer puntos para su inclusión en el orden del día provisional de las sesiones ordinarias o extraordinarias y el derecho a solicitar la inclusión de puntos suplementarios o adicionales en el orden del día de las sesiones ordinarias o extraordinarias;

֎ El derecho de los miembros de la delegación del Estado de Palestina a ser elegidos miembros de la Mesa del Pleno y de las Comisiones Principales de la Asamblea General;

֎ La participación plena y efectiva en las conferencias de las Naciones Unidas y en las conferencias y reuniones internacionales convocadas bajo los auspicios de la Asamblea General o, según proceda, bajo los auspicios de otros órganos de las Naciones Unidas.

Estados Unidos, que ha ejercido una presión constante en los últimos días, denunció que ese primer borrador suponía “burlar al Consejo de Seguridad” y la propia carta fundacional de la ONU con sus reglas, lo que creaba además un peligroso precedente, de ahí que la versión final de la resolución haya sido convenientemente rebajada.

Lágrimas de sangre

La sesión de este viernes tuvo sus momentos dramáticos, como cuando Riyad Mansour, Observador Permanente del Estado observador de Palestina, recordó que la bandera palestina “vuela alto y con orgullo en Palestina y en todo el globo y en el campus de la Universidad de Columbia”, momento en que se le quebró la voz.

Mansour reclamó su derecho a un Estado palestino que “no puede depender del veto de Israel ni es negociable”, y subrayó que el voto de este viernes tenía un carácter histórico.

Relató los devastadores efectos de la guerra en curso en Gaza, con más de 35 mil palestinos muertos, otros 80 mil heridos y más de dos millones de desplazados.

“No hay palabras que puedan captar lo que tales pérdidas y traumas significan para los palestinos, sus familias, sus comunidades y para nuestra nación en su conjunto”, afirmó.

Añadió que los palestinos de Gaza se han visto empujados al “borde mismo” de la Franja, “al borde mismo de la vida” con “bombas y balas que les persiguen”.

Mansour destacó que, a pesar de los ataques y la destrucción, la bandera de Palestina “ondea alta y orgullosa” en Palestina y en todo el mundo, convirtiéndose en un “símbolo enarbolado por todos aquellos que creen en la libertad y en su justo gobierno”.

“Es cierto que no desapareceremos, pero las vidas perdidas no se pueden recuperar”, afirmó. Dijo que la gente tiene que tomar una decisión: estar al lado del derecho de una nación a vivir en libertad y dignidad en su tierra ancestral, estar con la paz y reconocer los derechos de los palestinos, o pueden quedarse al margen de la historia.

Mansour afirmó que, tras cincuenta años de estatus de observador, “deseamos de todos aquellos que invocan la Carta de la ONU que respeten el derecho del pueblo palestino a la autodeterminación garantizado por la Carta”.

“Un voto “Sí” es un voto a favor de la existencia palestina, no es contra ningún Estado, sino contra nuestros intentos de privarnos de nuestro Estado”, añadió, afirmando que sería una inversión en la paz y un empoderamiento de las fuerzas de la paz.

A Mansour le sucedió en el estrado el extremista embajador de Israel, Gilad Erdan, aficionado a los golpes de teatro, que dijo que una sesión como la de este viernes significaba el fin de los principios que inspiraron la creación de la ONU, y para ilustrarlo sacó una pequeña trituradora de papel donde introdujo la carta fundacional de Naciones Unidas.

Poco antes había enarbolado ante los delegados una foto del líder de Hamás, Yahya Sinwar (al que se supone escondido en algún lugar de Gaza), y dijo que otorgar a Palestina la condición de Estado significaba que ese sería su nuevo presidente, pues equivalía a “dar todos los privilegios al futuro Estado terrorista de Hamas”, advirtió.