El gran reajuste monetario y por qué Europa está atrapada Por Tom Luongo | Gold Goats 'n Guns, EEUU

Hay muchas noticias sobre los cambios que se están produciendo en el comercio mundial de divisas. Desde “Gas por los rublos” hasta “¿Qué demonios pasa con el yen?”, hay muchas preguntas y muy pocas respuestas sobre lo que significa todo esto y de qué lado está la división.

La Reserva Federal de EEUU acaba de subir 50 puntos básicos por primera vez desde el año 2000 y va a retirar su balance obligando al Tesoro a dejar de emitir nueva deuda a tipos estúpidos. La Unión Europea dio a conocer un sexto paquete de sanciones contra Rusia que exige un embargo completo de todo el petróleo ruso.

Además, la UE está imitando lo que la Administración Trump intentó hacer con Irán en 2018, sancionando todos los servicios, incluidos los seguros, a todos los cargadores de petróleo para que no hagan ningún negocio con Rusia y sancionando a los bancos rusos.

El bloque europeo está proponiendo prohibir a los buques y empresas europeas la prestación de servicios –incluidos los seguros– vinculados al transporte de petróleo y productos rusos a nivel mundial como parte de su nuevo paquete de sanciones, según funcionarios y un borrador de documento visto por Bloomberg.

Aunque los Estados miembros todavía están discutiendo los términos, se trata de una herramienta potencialmente poderosa, ya que el 95% de la cobertura de responsabilidad civil de los petroleros del mundo se gestiona a través de una organización de seguros con sede en Londres, el Grupo Internacional de Clubes de P&I, que tiene que respetar la legislación europea.

Estas sanciones, que politizan de hecho todos los aspectos de los negocios y el comercio internacionales, no son en última instancia más que molestias a corto plazo para Rusia o cualquier otra persona. Revelan una mentalidad a la que no le importan los efectos posteriores de estas acciones y, en todo caso, denotan la desesperación que siente Bruselas hoy en día sobre su posición en el mercado global.

He dedicado cientos de columnas a intentar explicar al mundo que lo que impulsa todas sus decisiones es la mentalidad totalitaria de la UE, basada en su desequilibrio psicológico y en su necesidad ideológica de ser considerados los campeones de la humanidad.

EEUU no está tan motivado. Somos mucho más fáciles de entender. Nos gusta el poder, pero sólo mientras nos reporte beneficios.

 

La UE es un animal acorralado

Este paquete de sanciones es una prueba prima facie (en principio) de su locura y de lo que ocurre cuando, como un animal acorralado, se enfrentan a una elección existencial. La UE está construida sobre la base de aislar a sus dirigentes de las vicisitudes de la opinión pública.

El populismo es una palabra de cuatro letras en el vocabulario de los eurócratas.

Las consecuencias de esta política concebida por los bufones del Foro Económico Mundial, la multitud de Davos, son irrelevantes para ellos a corto plazo. Sí, los europeos sufrirán una inflación tremendamente alta porque, si tienen éxito en sacar la mayor parte del petróleo ruso de los mercados mundiales, sólo conseguirán que los precios se disparen.

¿Cree usted que la misma gente que tiene una agenda de despoblación declarada que ordenó una vacuna de Pfizer con un 12% de efectividad y que no fue probada en absoluto en mujeres embarazadas para que no se les prohibiera participar en la sociedad europea se preocupa un ápice por la gente que gobierna? Por supuesto que no.

Supongo que esto es lo que quieren decir cuando invocan los “valores europeos”.

Así pues, téngalo muy en cuenta cuando analice los siguientes escenarios y lo que realmente está en juego para ellos y para nosotros en el futuro. Se trata de personas que sólo están en el poder porque controlan el proceso político que se les ha entregado a través de un sistema monetario corrupto que institucionaliza el efecto Cantillón (cambio en los precios relativos resultante de un cambio en la oferta monetaria; es la expansión desigual de la cantidad de dinero) de imprimir dinero para concederles ventajas inmerecidas en el mercado.

Una de las armas más fuertes que Rusia tiene en su arsenal es la necesidad del mundo de los productos básicos que producen y su capacidad ahora, con el sistema financiero mundial tambaleándose al borde del colapso, para establecer sus propias condiciones de pago.

Ronan Manly (analista de investigación interesado en el mercado del oro monetario), en Bullion Star, escribió recientemente un gran artículo que es, creo, el fundamental para entender lo que está pasando en Rusia. En él, Manly repasa los pasos que están dando los rusos para pasar de un régimen monetario basado exclusivamente en la deuda a otro basado en las materias primas. Esta idea es promulgada por Sergei Glazyev, que dirige la creación de una especie de DEG para la Unión Económica Euroasiática (UEEA).

La dicotomía monetaria de Rusia

El Banco de Rusia se opone firmemente a esta iniciativa. Un mecenas me pidió que explicara esta dicotomía.

“Me parece que el plan de Glazyev para la nueva moneda de la UEEA no es hacer que el rublo sea canjeable por oro, como el antiguo dólar respaldado por oro, sino valorarlo frente al precio del oro y de otras 19 materias primas, más las monedas de los países miembros. La cesta, incluido el oro, será una medida de valor, un criterio para comparar el valor de las monedas de los países miembros. La cesta no se comercializará, sólo se hará un seguimiento de su valor global.

“La jefa del Banco de Rusia, Elvira Nabiullina, es una obediente servidora del FMI. Dirige una institución que no está explícitamente bajo el control del Kremlin, al igual que la Reserva Federal (FED) en EEUU. Dicho esto, Putin tiene más autoridad sobre el Banco Central debido al poder del presidente ruso y a la realidad de que el Estado ruso es lo suficientemente fuerte como para dictar las condiciones a sus oligarcas, en lugar de lo contrario aquí en Occidente.

“Pero el Banco de Rusia sigue siendo dirigido operativamente con el pensamiento del FMI”.

Mi respuesta: Sí, Nabiullina es una buena lacaya del FMI. Al mismo tiempo, [Nikolai] Patruchev (Secretario del Consejo de Seguridad de la Federación Rusa) dice lo contrario. El Consejo de Seguridad es más poderoso que el Banco de Rusia. Así que escucha a Nabiullina de la misma manera que escucho a la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, como portavoz de las potencias extranjeras.

Mientras tanto, Jerome Powell (Presidente de la FED) y los miembros del Consejo del Tesoro ruso le dicen lo que va a pasar…. Se avecina un rublo de dos niveles en Rusia y la FED está presionando por la disciplina fiscal en el Capitolio. El Banco de Rusia se está preparando para quebrar y ser nacionalizado.

La Unión Económica Euroasiática (UEE) establecerá Derechos Especiales de Giro (DEG) respaldados por materias primas y el rublo doméstico de Rusia será convertible en oro, mientras que el rublo internacional, digamos RBO (Rublo offshore) circulará para permitir a la gente pagar las importaciones.

Lo que quiero decir con esta respuesta es que el respaldo del rublo en oro para fines internos y el DEG respaldado por productos básicos de la UEE son dos cuestiones distintas. Una es la política interior rusa, la otra es una característica de la nueva política comercial y exterior panasiática. Creo que es un error mezclar estas cuestiones. Un error fácil de cometer, claro, pero un error al fin y al cabo.

Así que, con esto en mente, podemos ver ahora los objetivos actuales de Rusia en lo que respecta a su situación actual: cómo romper el apoyo de la UE a la guerra en Ucrania. Esta es, categóricamente, la cuestión más importante para Rusia de cara al futuro.

Al crear el Gazprombank como una especie de Banco de exportaciones e importaciones ruso para tratar con los imbéciles, Rusia tiene ahora un vehículo para asegurarse de obtener lo que quiera por sus exportaciones.

El efecto de primer orden es que el coste de la volatilidad de las divisas se traslada al comprador de la exportación. Ahora tienen que planificar cómo conseguir rublos y a cualquier precio que esté disponible para ellos. Al no existir hasta ahora un mercado internacional para el rublo, esto significa que Gazprombank acude a la bolsa de Moscú y compra rublos para venderlos a un importador de gas alemán, por ejemplo.

Esta es, en estos momentos, la principal razón por la que el rublo se está fortaleciendo de forma espectacular frente a todas las monedas “poco amigables”. El esquema hasta la fecha ha sido tan exitoso, frente a un incipiente mercado alcista del dólar, que sólo éste y el real brasileño han subido frente al dólar en el último año. De nuevo: sólo dos monedas han subido frente al dólar en el último año: el real brasileño y el rublo ruso.

La verdad es traición

Dada la necesidad internacional del rublo, que ahora es fundamental para un comercio mundial funcional de productos básicos, de repente la perspectiva de una curva a plazo del rublo ruso que no sea una completa broma parece bastante buena. Eso, en sí mismo, es un cambio masivo en el sistema financiero mundial. Pero, espera…. ¡hay más!

Si estos países “no amistosos” de Rusia no están dirigidos por completos retrasados –una mala suposición, lo sé– entonces comenzarán a establecer un mercado de futuros del rublo en el extranjero… ¿Eurorublos?… para hacer frente a sus futuras necesidades de productos básicos rusos.

Ahora puedes entender por qué la presidenta de la Comisión de la UE, Cruella Ursula der Leyen, se empeña en intentar embargar las materias primas rusas. Davos necesita mantener el control sobre los términos del comercio.

Necesitan ejercer el poder que aún tienen en un entorno en el que cada vez son más irrelevantes para el comercio mundial. Europa está dirigida por personas que no creen en el crecimiento. Son los niños del cartel del cambio climático y del movimiento contra el crecimiento ilimitado.

En Davos, dos generaciones enteras de occidentales han aprendido el argumento maltusiano de que no se puede tener un crecimiento infinito en un mundo finito. Todo su dogma económico se basa en esto.

No importa que este tema de conversación se base en una premisa absurda, la verdad es, después de todo, traición, en este punto del ciclo económico y cultural. Pero, para intentar explicarlo rápidamente para esos torpes. El crecimiento del PIB no es necesariamente crecimiento real. Es sólo gasto. No dice nada sobre la calidad del gasto ni sobre si, en términos reales, las personas que gastan el dinero están materialmente mejor que en un momento anterior.

Lo que no se mide con el PIB es el VALOR. El valor es lo que anhelamos, la capacidad de planificar más en el futuro, utilizando nuestro ingenio para encontrar mejores trampas para construir y formas más eficientes, y sí sostenibles, de desplegar el escaso capital y tiempo.

Cuando tienes un sistema monetario y un régimen regulatorio diseñado para frustrar eso para detener el crecimiento, entonces tienes el mundo en el que vivimos hoy. Ese crecimiento infinito es una medida subjetiva, no objetiva …. no en términos de PIB sino en términos de “alivio de la miseria humana”.

Davos no quiere en absoluto esto porque un mundo donde todos obtienen el máximo valor por su tiempo es un mundo sin que los necesitemos a ellos (Davos).

¿Entendido? Bien. Ahora ya sabes por qué la UE chupa el sudor de las pelotas de un muerto y cuyas ideas deberían ser rechazadas totalmente y de todas las formas imaginables.

Dinero del monopsonio

Davos y la UE se enzarzan en intentos cada vez más quijotescos de hacer valer el poder del monopsonio (el mercado en el que hay un único comprador) sobre las exportaciones de Rusia.

Gazprombank se sentará ahora sobre un montón de euros, dólares, yenes, etc., de los que no tiene intención de cubrir el riesgo. No tiene necesidad de cubrir ese riesgo porque realmente no puede utilizar esos euros, dólares, yenes, etc. para nada porque esos bancos tienen prohibido hacer negocios con él. Así que Gazprombank los venderá a quien los quiera.

Cuando miro alrededor del mundo, ahora que la Reserva Federal está vaciando el mundo de dólares estadounidenses, ¿quién necesita esas monedas “poco amigables”?

Los países que tomaron billones en préstamos denominados en esas monedas, incluida la propia Rusia. Así pues, Gazprombank puede realizar los pagos de los préstamos o incluso rescatar sus préstamos pendientes en estas monedas y sacarlos de los libros.

La otra opción es convertirlas en divisas que Rusia aún necesita para liquidar el comercio. La más obvia aquí es Turquía. Recientemente, Zerohedge publicó un artículo sobre la última vuelta de tuerca de la Erdonomía (obra del presidente Recep Tayyip Erdogan), que el Tyler que escribía el artículo tachó de imbécil.

Zerohedge (blog financiero de Estados Unidos) publicó:

«Bloomberg informa de que Turquía está trabajando en un plan para atraer la entrada de divisas ofreciendo financiación en liras, sin intereses y con una rentabilidad “garantizada” del 4% en dólares, a los inversores extranjeros dispuestos a aparcar su dinero durante al menos dos años. No hace falta decirlo, pero cada vez que Turquía “garantiza” algo, corre.

Según el plan, el banco central proporcionaría liquidez en liras a los extranjeros para que inviertan en bonos locales con un vencimiento de al menos dos años, según una persona con conocimiento directo de las deliberaciones. Además de ampliar los swaps de rendimiento cero, la autoridad monetaria también garantizaría un rendimiento del 4% en términos de dólares cuando los valores venzan, dijo la persona.

Traducción: por favor, dennos sus dólares y prometemos cuidarlos bien e incluso darles un rendimiento mucho mayor que el que pueden ganar (por ahora) en Estados Unidos».

No. En realidad la traducción real es esta:

Gazprombank puede blanquear euros y dólares en Turquía y conseguir liras turcas al 4% para ayudar a Turquía a deshacer su exposición al dólar y pagar sus déficits de capital extranjero.

También crea un vehículo para ajustar esa tasa de pago en función de los cambios en el mercado. ¿Dónde más se pueden conseguir dólares a 2 años que paguen un 4% ahora mismo? Desde luego, no en los mercados de deuda corporativa de primer orden ni en los del tesoro estadounidense.

Y de este modo, Gazprombank se asegura de que Turquía siga siendo solvente, aparcando parte de su superávit comercial en un socio energético estratégicamente importante, que casualmente también transporta el gas a Europa, lo que ayudará a romper la política de la UE sobre el pago del gas con rublos en primer lugar, es decir, ¡Alemania, Hungría, Austria, Bulgaria…!

Es un poco hermoso cuando lo piensas de esa manera.

Una vez más, esta es la razón por la que Cruella Ursula der Leyen está tan furiosa y por la que la UE está tratando de impedir que esto ocurra.

Un DEG de otra madre patria

El sistema de Derechos Especiales de Giro (DEG) de la UEEA que propone Sergei Glazyev es entonces la moneda regional para unir a todos y construir un nuevo bloque comercial.

Recordemos que la UEEA es lo que se suponía que era la UE, una simple unión con reglas comerciales justas entre sus miembros. A diferencia del euro, que superpuso la calificación crediticia de Alemania a todo el continente creando una especie de mercantilismo interno en beneficio de Alemania, Glazyev propone utilizar una cesta de productos básicos como tipo de cambio para la moneda común.

Esto es mucho más justo y permitirá a los productores de materias primas cobrar adecuadamente por sus exportaciones y a las economías de valor añadido pagar sus verdaderos costes de producción.

Alemania se ha ensañado con los países PIIGS (término que designa a Portugal, Irlanda, Italia, Grecia y España), y con Grecia en particular durante años, despojando al país de sus recursos como pago por su “necesaria” reestructuración de la deuda. ¿Alguien cree que con un apologista de la Wehrmacht alemana bajo Rommel a cargo de la Comisión de la UE puesto allí por otro alemán de dudosa herencia (Klaus Martin Schwab, creador del Foro Económico Mundial) va a cambiar materialmente esa política ahora?

Le invito a que busque la palabra ingenuo en el diccionario y luego la ponga junto a su cara en el espejo.

No es de extrañar que Bloomberg “enterrara la cabecera” en su artículo sobre las nuevas sanciones que he enlazado más arriba, citando la oposición griega y chipriota a este plan para llevar a la quiebra a los cargadores, desde donde todos ellos operan: “Grecia, Chipre y Malta plantearon dudas sobre la prohibición y sobre si ayudaría a Europa a alcanzar sus objetivos sin perjudicar a las empresas europeas, según dos diplomáticos familiarizados con el asunto. Grecia y Chipre tienen grandes industrias navieras, mientras que Malta es un llamado Estado de abanderamiento, donde las empresas pueden registrar sus buques a efectos de propiedad”.

Por eso Eslovaquia y la República Checa se unieron a Hungría y Bulgaria (que reciben gas de Turkstream 2) para oponerse a la prohibición del petróleo ruso. El oleoducto Druzhba es la única forma que tienen de importar petróleo, ya que son países sin salida al mar.

También es la razón por la que la UE presiona tanto a Serbia para que siga la propaganda de guerra rusa, porque la línea ferroviaria que sirve a esos países desde el puerto griego de Salónica pasa por Belgrado.

La UE está más que comprometida con este plan de acción, sabiendo muy bien cuáles son los efectos potenciales. Cuando se junta todo, casi no tienen otra opción si quieren “ganar”.

Como siempre, Alemania lidera a sus socios del norte de Europa en una política diseñada para llevar a la quiebra a los países más pequeños del Pacto de Varsovia, al tiempo que intenta aislar aún más a Grecia, que es ahora un destino clave de las importaciones de esos mismos países.

Conozcan al nuevo Reich, el mismo que el anterior, especialmente cuando se profundiza en esos documentos de Pfizer. Sólo que esta vez está alimentado por la máquina de guerra de Estados Unidos en lugar de oponerse a ella.

Los dirigentes de la UE y de Davos comprenden que, al final, su control sobre esos países es tenue. La población de muchos de ellos es la directamente afectada por su deseado divorcio de Rusia. Se trata de una política y un plan diseñados para obligarlos a someterse y mantenerlos en el suelo, justificando así a los países centrales que no son más que unos aprovechados y unos gorrones de la gloria de los países más fuertes.

Este embargo contra la energía rusa no es sólo para castigar a Rusia por tener la temeridad de defender sus intereses y su soberanía, sino también para destruir cualquier posible vía de escape mediante el progreso económico y la energía rusa barata para aquellos países que hace treinta años juraron a Yeltsin que nunca se acercarían a Rusia ni un centímetro.