A 63 años de la masacre en la Cárcel de La Aviación Managua. Radio La Primerísima

A 63 años de la masacre en la Cárcel de La Aviación Managua. Radio La Primerísima

La masacre en la cárcel de La Aviación no fue una coincidencia de fechas, sino un intento más de borrar todo lo que olía a Sandino consideró a Radio La Primerísima el diputado sandinista, Edwin Castro.

El 18 de mayo de 1960 los patriotas nicaragüenses Edwin Castro Rodríguez, Ausberto Narváez Parajón y Cornelio Silva, fueron asesinados en la cárcel La Aviación, en Managua, por la dictadura somocista, después de 4 años de atroces torturas.

“Yo no creo que haya sido una coincidencia de fechas, mi teoría es que fue a propósito…, masacrarlos a ellos en la cárcel un 18 de mayo, como un intento más de borrar todo lo que olía a Sandino”, dijo Castro.

Indicó que estos tres jóvenes acompañaron a Rigoberto en lo que yo llamaría la reivindicación de Sandino, de la traición a Sandino, cuando él buscaba la paz, ya después de haber expulsado a los marines.

“Le aplicaron la Ley Fuga, sin embargo, los tres fueron muertos por sin número de balazos, Cornelio presentaba más de 30 balazos en su cuerpo, además en el dictamen médico lo dice, había sido castrado de forma no quirúrgica, es decir en tortura, Humberto tenía otra cantidad similar de balazos, mí padre tenía más de 40 balazos en todo el cuerpo, media cara destrozada, eso te demuestra que no hay tal fuga, fue un fusilamiento a mansalva, coincidiendo con el cumpleaños de Sandino”, recordó Castro.

“Esas historias, esas anécdotas, esos héroes lo que nos hacen posible que hoy sigamos cambiando Nicaragua”, concluyó.

“Los mártires del 18 de mayo” a como se les conoció luego estaban condenados a 15 años de prisión por haber llevado a cabo, junto al poeta Rigoberto López Pérez el ajusticiamiento de Somoza García, el 21 de septiembre de 1956.

Las autopsias demostraron el enorme número de disparos que recibieron y que causaron tremenda cantidad de orificios y destrozos en los cuerpos.  Los restos de Edwin y de Ausberto fueron enviados a León, y, los de Cornelio “Nelo”, a su pueblo natal, La Libertad, Chontales.


Cornelio Silva